No me mal interprete, yo extraño sus besos, sus abrazos, sus caricias.
Mi corazón no deja de pensarle y creo que mi cerebro ya le ama,
sin embargo, yo siempre voy a extrañar a alguien y no quisiera tener nada que me haga recordarle,
y es que, supongo que algunos nacimos para extrañar.
hay quienes viven siempre en un recuerdo y los que les hacemos eternos.